Córdoba, Ver.– La salud en la zona centro del estado está en jaque. El Hospital General de Córdoba (antes Yanga ) atraviesa una crisis sanitaria alarmante que obligó a la suspensión de todas las cirugías, dejando a cientos de pacientes sin atención quirúrgica.
Los quirófanos y baños del hospital presentan condiciones deplorables, con basura acumulada y desechos biológicos sin control, lo que representa un riesgo latente de contagios e infecciones graves. “Así no se puede operar, es poner en juego la vida de los enfermos”, expresaron médicos bajo condición de anonimato.
La situación estalló tras el paro del personal de limpieza de la empresa LEIH, que denuncia llevar dos quincenas sin recibir su salario. Sin trabajadores que realicen el mantenimiento básico, el hospital quedó literalmente convertido en un foco de infección.
Familiares de pacientes y personal médico acusan a las autoridades de indiferencia y negligencia criminal. “No podemos permitir que un hospital de referencia esté abandonado de esta manera. Aquí se atiende gente humilde, que no tiene a dónde más ir, y lo que reciben es un lugar sucio y sin garantías de salud”, reprocharon.
La falta de respuesta por parte de las autoridades de salud y del Gobierno Federal ha provocado indignación y temor, pues se trata de uno de los principales hospitales de la región Córdoba–Yanga, donde cada día acuden decenas de personas en busca de atención médica.
Mientras tanto, las cirugías están suspendidas y los enfermos esperan en medio de la incertidumbre. El llamado es urgente: o se interviene de inmediato, o la negligencia institucional podría cobrarse vidas.
